Imponente...Majestuoso... Implacable...
Como el rey de la selva
Así es el mar.
Imponente
Por sus dimensiones,
Su capacidad de imitar el color del cielo
Y confundirse o contrastar con él.
Majestuoso
Por su propia belleza
Y la que se oculta en su oscuro seno.
Por ser único y plural
Implacable
Porque como al león
Su rugido se escucha a la distancia
Y una vez que rugió su paso dejará su marca ...
En la playa.
Pero luego,
Como felino descansando al sol
Extenderá sus aguas sobre la arena;
Como lenguas felinas lamiendo su cría
Llegará la ola, la espuma
El olor a sal
Tu olor, mi mar...
He visto otros mares:
Más claros, más limpios,
Más verdes, más cálidos, unos.
Más fríos, más furiosos en su oleaje, otros.
Me recuerdan a ti
Pero no son vos.
Porque a mi mar
Pueden faltarle las luces del mar de Miami
O el ritmo y el fuego del mar de Río
Pero tiene una arena tibia que guarda mi historia,
Mis raíces, mis sueños...
Tiene una humedad
Con olor a yodo y sal,
El mismo que acompañó a mi abuelo tano
Y mi papá cuando iban a pescar.
Puede faltarle la imponencia en las olas
Del mar de Neruda
Pero tiene un reflejo dorado
Que mi mamá siempre amó.
Mi mar estaba detrás de un Monte
Hermoso él, que minimizado
ante tanta belleza verde azulada...
desapareció
para que las aguas se luzcan
y aparezca éste, nuestro mar
tu mar... mi mar.
* ( Monte Hermoso)